Thursday, March 19, 2009

Slumdog Wrestler

Camaradas, después de unas cuantas entradas dedicadas a nuestros ilustrísimos políticos, pasemos ahora a temas más agradables que involucran a gente que sabe hacer su trabajo. Disfruten.

La academia ya decidió premiar a varios trabajadores del cine este año. Si bien estamos acostumbrados a que no se reconozca lo mejor (por ejemplo, el titánico bodrio noventero) esta vez concuerdo con varios premios. Era evidente que el difunto camarada Heath Ledger iba a recibir un OSCAR por The Dark Knight. Estoy consciente de que fue un galardón otorgado en gran parte por la corrección política de Hollywood. Sin embargo, hemos de recordar que su interpretación del Joker es lo más memorable de la película y es, sin duda, uno de los mejores villanos que han habido en el cine. En este papel, Ledger superó ampliamente al señor Jack Nicholson. Agregando a esto que los personajes, tanto el Guasón como Batman, son más creíbles cuando los actores no tienen tanta juventud acumulada, como Jack Nicholson y Michael Keaton en el Batman burtoniano. El reconocimiento era algo de esperarse.

Este año revivieron dos de los directores vivos más famosos. Ambos llevaban mucho tiempo sin hacer una película decente: Danny Boyle y Darren Aronofsky. Me ocuparé primero del trabajo del señor Boyle. Él fue famoso por una de mis películas favoritas: Trainspotting, mas parecía que iba a ser un director one hit wonder. Su más reciente película fue la más premiada de la noche oscaril. Generalmente tantos premios de la academia no son un buen augurio para una película; no obstante, Slumdog Millionaire es una verdadera maravilla de este director inglés y, por cierto, nada tiene que ver con Trainspotting. Resulta bastante refresacante ver en el cine comercial una película que no es estelarizada por las "grandes estrellas" del cine de Estados Unidos.

     Visualmente es atractiva, los colores a lo largo de la película intensifican la intención de las escenas. No es una película que parezca el típico drama de Hollywood, de ésas de cartel con fondo blanco o negro. Se nota que realmente NO es una película californiana. Además, aumentó mi gusto por aquel guilty pleasure llamado Paper Planes. Finalmente, me sorprendió el hecho de que cuando la fui a ver, la sala tenía grandes grupos de adolescentes (usualmente ruidosos en el cine) pero éstos estuvieron callados viendo la película. Es una cinta a prueba de adolescentes gritones; vamos, eso es mejor publicidad que cualquier cantidad de estatuillas.

    El segundo resucitado este año es el director del π y Requiem for a Dream. Hace un par de años presentó The Fountain, que comparada con sus trabajos anteriores es un tanto. . .desafortunada. Al parecer a Aronofsky le salen mejor las cosas cuando de personajes en plena degradación se trata. The Wrestler trata sobre un luchador (como dice CLARAMENTE el título) cuya carrera ya ha terminado. Oportunamente recordaba el honorable camarada Shah of Blah en sus diarios caminantes, la lucha libre en Estados Unidos es considerado más espectáculo que deporte. El personaje del señor Mickey Rourke es una especie de rockstar acabado (vean Rock of Love y sabrán a qué me refiero). A diferencia de Slumdog Millionaire, The Wrestler es una película poco colorida sin que por eso sea poco atractiva. La atmósfera recuerda por momentos a la segunda mitad de Requiem for a Dream, no así la música que es una buena mezcla entre rock ochentero y el trabajo de Mansell.

Tanto Mickey Rourke como Marisa Tomei logran, guiados por Aronofsky, malviajar al espectador de buena manera. Esto es, no en el sentido en el que lo hace Chespirito, quien provoca incontenibles deseos de morder con violencia las propias muñecas para tener una muerte segura y no ver más su programa. En la película se puede leer completamente al personaje de Rourke sin escuchar la voz de un narrador que dice cosas como: "estoy pensando y creo que estoy jodido", recurso que me resulta casi siempre molesto. Confiemos en que pasen menos de diez años antes de que estos dos vuelvan a hacer una buena película.

Camaradas, espero hayan disfrutado la entrada. Vayan al cine mientras sigan en cartelera.

Saturday, March 7, 2009

La Chava del Ocho

Camaradas, en esta entrada acataré las sugerencias de un gran amigo y lector, el honorable Shah of Blah. Esta vez habrá dos entradas más o menos seguidas, sólo que los temas son completamente distintos. Esto es una especie de continuación de la entrada anterior que se enfoca en otro punto.

En la entrada anterior (que pueden leer más abajo) escribí sobre lo molesto que era tener que ver la horrenda cara de Manlio o de cualquier otro político durante la transmisión de un partido de football. Expresé mi desprecio por esos hipócritas e inútiles anuncios del IFE, PRI, PAN, PRD, los otros partiditos inútiles, Televisa, TV Azteca, el Peje (acompañado de sus fieles moneros burócratas como Helguera, Hernández). No obstante, esta vez un personaje parido por el más vivo ejemplo de cinismo, parasitosis, inutilidad e involución de la política Mexicana (incluso más que AMLO), ahora con nuevos compañeritos, me dice por qué votar a favor de la opción que representa. Me alegra que se esté fortaleciendo ESTA democracia. 

(Antes de seguir leyendo recomiendo vean el anuncio de 21 segundos picando aquí)

El mensaje es preciso y claro. Después de esta fuerte persuación espero con ansias el día de las elecciones para darle un voto a Ronald McDonald. Lo peor, camaradas, es que seguramente escucharemos interminables y sosos debates con grandes académicos como el señor Lorenzo Meyer que, vestido de negro, nos habla de cómo puede establecer un paralelismo entre la revolución mexicana y el que a la tamalera que está afuera de su casa se le hayan acabado los tamales de verde (sic) cuando la mayoría de la gente no se pone a pensar en cuál es la plataforma política del partido, ni si se trata de Socialdemocracia, o si la ultraderecha hipercapitalista se come a los niños pobres en sopa o cualquier estupidez del estilo, simplemente vota porque sí. 

Un anuncio del IFE muestra a un pueblo genérico (de ésos en los que sólo hay narcos y Coca-Cola) en el que celebran el triunfo electoral de una mujer. Al ver este pedazo de propaganda me hice una pregunta y la planteo acá, porque sé que algunos de ustedes leen periódicos. ¿Qué fue de Eufrosina Cruz? Hace un año hubo un escándalo porque en el pueblo de Santa Maria Quiegolani, Oaxaca. Una mujer trató de ser gobernante, pero el gobierno local destruyó las boletas que le eran favorables. Hasta donde me quedé ya no la dejaron tomar posesión del cargo sólo por ser mujer poniendo, así, a las buenas conciencias en un predicamento: los usos y costumbres contra la libertad política. Como todos sabemos, el derecho a ser un protoneanderthal falocéntrico existe en México bajo la denominación de "usos y costumbres". Que Dios bendiga el derecho que me da el estado mexicano para matar como salvaje, privar de libertades económicas, políticas e intelectuales a las personas, despreciar a las mujeres al grado de afirmar que son sólo"pa'l metate y pa'l petate" con el noble fin de conservar las tradiciones del México Profundo

Siguiendo el "uso y costumbre" de nuestros representantes del poder legislativo, basados en la firme creencia de que el mundo se resuelve con letra muerta, han promulgado leyes que buscan una igualdad de sexos. Incluso se  organizan comisiones con la misma cantidad de mujeres que de hombres. Agradezco que Don Manlio se preocupe porque no importe la capacidad de las personas, sino el que haya tantos cóncavos como convexos. No importa que para resolver un problema particular la distribución de la capacidad para resolverlo no sea uniforme entre los candidatos a los puestos, no importa si el resultado mejoraría si la mayoría está conformada por hombres o por mujeres, hay que lograr el igualitarismo de sexos. 

¿Qué es camaradas la igualdad de sexos sino una propuesta tan idiota que no contempla la más mínima evidencia biológica? Claro que los hombres y las mujeres son diferentes. Si no se plantea bien el problema desde el principio no se puede encontrar una verdadera solución a éste. ¿A qué demonios se refieren nuestras buenas conciencias con esa igualdad? Asumo que se refieren a que todos los ciudadanos tengamos las mismas libertades económicas, políticas, los mismos derechos culturales, intelectuales y físicos. En ese caso estaría completamente de acuerdo, pero nuestras buenas conciencias, como extensión de los politiquillos, prefieren mantener las discusiones en términos abstrusos buscando un igualitarismo que, si Beatriz Paredes logró, México puede lograr.

Fin de la entrada y disculpen el horrible título. Buen día.